Caso de Estudio 5.1: Verificando un vídeo clave de las bombas de Boston
Uno de los videos icónicos de los trágicas explosiones de Boston en el 2013 fue filmado por una atleta que estaba corriendo su última milla en el maratón. Al acercarse a la meta en la Calle Boylston, la segunda bomba detonó a sólo metros delante de ella. Era un video impactante, pero necesitábamos verificarlo.
Una foto que mostraba el momento de la explosión fue publicada en Twitter por el periodista Dan Lampariello de Boston (abajo), quien es miembro de una de nuestra listas pre-curadas de Twitter, y alguien conocido para Storyful. El tuit de Lampariello estaba geo-localizado en la Calle Boylston; esta información, proveniente de una fuente confiable, ayudó a confirmar la ubicación de la explosión. También nos daba un punto de referencia a usar con lo que se mostraba en el video de la corredora.
Second explosion going off @ Coply Square. #marathonmonday @universalhub pic.twitter.com/rOQ9EnTkx1
— Boston to a Ⓣ (@Boston_to_a_T) April 15, 2013
La Google Street View de la Calle Boylston (abajo) confirmó tanto la foto de Dan Lampariello como el punto de vista de la atleta al acercarse ésta a la línea de meta. De hecho, algunos de los deportistas filmados en el video se pueden ver en la foto de Lampariello cuando se examina cuidadosamente.
Dicho proceso confirmó el contenido del video. Encontrar la fuente original del mismo no fue tan directo.
El video como tal fue subido a una cuenta de YouTube sin mayores detalles y con un nombre de usuario oscuro, NekoAngel3Wolf. Una búsqueda en Twitter del video nos llevó a alguien que lo compartía bajo el alias NightNeko3, de nuevo, sin detalles personales. La referencia a “Neko” en ambos perfiles sugería que los mismos estaban relacionados.
Buscando perfiles sociales similares, encontramos una cuenta de Pinterest también registrada como NightNeko3, que nos daba el nombre real de Morgan Treacy. Nuestro equipo en Storyful rápidamente localizó una cuenta de Facebook de Morgan Treacy, una adolescente cuyas publicaciones estaba geo-localizadas en Ballston Spa, estado de Nueva York.
Morgan describió el video en Twitter como la perspectiva de su madre de la explosión. Sabiendo que un maratón prestigioso como el de Bostón probablemente registraría los tiempos de los atletas, revisamos el apellido “Treacy” en la página de participantes de la Asociación Atlética de Boston. Obtuvimos un sólo resultado: Jennifer Treacy, 45-49 años, del estado de Nueva York. Los parciales de tiempo de Jennifer Treacy demuestran que pasó la marca de los 40 km a las 2:38 p.m. pero que no logró cruzar la meta a 2 km de distancia de allí. Jennifer estaba promediando 10 minutos por milla, lo que la colocaba en las cercanías de la explosión a las 2:50 p.m., cuando las bombas detonaron.
El sitio de búsqueda social de personas Spokeo.com nos dio una entrada para una Jennifer L. Treacy, de 47 años, habitante de Ballston Spa, Nueva York. LinkedIn también nos dio un perfil para Jennifer Treacy de Ballston Spa, quien era empleada del Departamento de Saludo del Estado de Nueva York.
Una última pieza de evidencia confirmó nuestra investigación. Un hombre llamado Gerard Quinn es amigo en Facebook de Morgan Treacy, de quien estábamos ahora casi 100% seguros era la hija de Jennifer. Con anterioridad Quinn había comentado en videos familiares subidos por Morgan, por lo que allí había un enlace entre él y la familia. En el perfil de Facebook de Quinn (abajo) vimos que él había expresado su orgullo por el hecho de que su sobrina, Jennifer, estaba corriendo en el maratón de Boston. Allí enlazaba a su mapa del maratón y parciales de tiempo. Luego igualmente comentó en Facebook que Jennifer estaba bien después de las explosiones y que estaba de vuelta a casa.
Un directorio telefónico público nos dio un número telefónico que nos permitió hablar directamente con Jennifer Treacy. Ella confirmó que el video era suyo y que las organizaciones de noticias tenían permitido usarlo. Ella también le había informado a los organismos de seguridad acerca del video, nos dijo.
En resumen, toda la información que soportó la veracidad de este video estaba disponible en línea mediante el uso de herramientas gratuitas: información de ubicación, relatos que corroboraban el evento, el historial digital de la persona que subió el video y los detalles de contacto de la propietaria del mismo. El estar familiarizados con estas herramientas nos permitió verificar el video en más o menos 10 minutos.